Por su preparación, Valerie Yulieth De Moya Castillo, estudiante de undécimo grado del Colegio Metropolitano de Soledad 2000, tenía plena confianza en obtener un buen resultado en las Pruebas Saber 11 ICFES 2025 y cumplió al sumar 471 puntos (lo máximo es 500), siendo uno de los mejores resultados del examen nacional y la primera en su institución educativa.

Sacó 100 puntos en tres áreas: matemáticas, ciencias y lectura crítica, además de 81 unidades en sociales e inglés.

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Su emoción por conocer su puntaje era tanta que trasnochó y a las dos de la mañana, en medio de la oscuridad y el silencio por la hora, gritó de felicidad en su habitación al ver la calificación en el celular.

Inmediatamente tomó captura a su puntaje y comenzó a compartirlo con sus familiares, amigos y profesores, quienes la felicitaron por el resultado y le expresaron su admiración. En especial sus padres, quienes la "hicieron sentir especial" y le comunicaron su orgullo por ser "tan aplicada" desde niña.

"Realmente fue un día en el que no dormí toda la noche esperando poder visualizar estos resultados que había esperado y ansiado tanto. Y tras este proceso largo de preparación, realmente era observar el fruto de todos esos esfuerzos que llevaba haciendo durante todo este periodo de tiempo. Me sentí muy emocionada", declaró a Zona Cero Valerie, quien cursa estudios en el Colegio Metropolitano de Soledad 2000 desde segundo de primaria.

Valerie, de 16 años, confesó que la preparación en el colegio para las pruebas es desde la primaria, pero se vuelve intensiva a partir de noveno grado con jornadas dobles, horas extras en vacaciones, entre otras.

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"Nosotros no hacemos Pre-ICFES sino profundización, que son unos procesos en los cuales nos enfocamos exclusivamente en esta prueba; comenzamos en grado 11 dos semanas antes de las clases, doble jornada, y también las vacaciones de mitad de año. Igualmente los sábados vamos en las horas de la mañana a la institución y tenemos excelentes profesores que ya han trabajado con diferentes promociones de estas pruebas. Nos brindan todas las herramientas posibles para que nosotros logremos sacar 100 en todas las áreas", agregó.

Además, agregó que "a nosotros nos prepararon para sacar 100 en todas las áreas y realmente fue un intensivo en todas las áreas. Un proceso de preparación fuerte de estudiar la estructura de las temáticas que se tocan en la pruebas, saberlas a profundidad y no solamente saberlas, sino aplicarlas a diferentes contextos. Al final eso es lo que evalúa el ICFES. No solamente el conocimiento que tú tienes, sino cómo aplicas este conocimiento en contextos específicos".

Ingeniería biomédica, su siguiente paso

Apasionada desde hace varios años por la matemática, geometría y física, el siguiente paso de Valerie De Moya es estudiar la carrera de ingeniería biomédica con la finalidad de contribuir al desarrollo de la salud y así impactar en la calidad de vida de las personas.

Además de convertirse en una "profesional de calidad" y poner al servicio de la comunidad todo su "ingenio" en esta labor.

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"Sobre todo brindar herramientas nuevas en el ámbito de la salud, creación de nuevos instrumentos biomédicos, biomateriales, de investigar y lograr hallar cosas que contribuyan a que el médico pueda llevar a cabo su labor de forma más efectiva", concluyó.

Está en proceso de inscripción con la Universidad del Norte para lograr una beca en 2026.